De los ENCUENTROS CON AUTORES, parte esencial del programa, hablaremos en otro momento, ya que nuestro instituto participa en los mismos.
Quizá nuestra feria tiene un carácter muy local y carece del prestigio y del "glamour" de la FERIA DEL LIBRO DE MADRID, que goza además, pese a las restricciones, de un presupuesto incomparablemente mayor. Desde el viernes 25 de mayo hasta el 10 de junio en el Parque del Retiro -nos vais a perdonar, pero no vamos a emplear esa memez de "marco incomparable"- miles de libros se expondrán a la curiosidad de los visitantes en más de 350 casetas. Este año se celebra la 71ª edición de la Feria y se va a dedicar a Italia, que es país invitado.
El programa de actos es casi imposible de resumir, pero tiene en las presentaciones de libros y en la firma de conocidos autores su punto fuerte. Allí es donde hay que estar si uno quiere conseguir una dedicatoria de sus autores favoritos, al precio de aguantar largas colas ante la caseta de turno. Hay gente para todo.
Las ferias del libro han perdido en los últimos tiempos el favor de que disfrutaban antes, cada día atraen menos visitantes y su cifra de ventas desciende año tras año, a lo que la crisis económica que padecemos o que nos hacen padecer no resulta ajena. El auge del libro digital por un lado, y la pujanza irresistible de las empresas de venta por Internet, como Amazon, que facilitan la compra del libro más reciente en la intimidad del hogar, por otro, quizá acaben convirtiéndolas en un fenómeno residual, pero la frialdad de un click en la pantalla es posible que nunca pueda superar al acto de hojear (u ojear) las páginas de un libro en la caseta de una feria o en los pasillos de una librería, sintiendo su tacto en las manos y su inconfundible olor en la pituitaria. Qué queréis, a algunos nos cuesta renunciar a los hábitos de toda una vida, aunque eso nos cueste más de un codazo, literal o figurado.
Sea como sea, o como queramos que sea, dentro de unos días en Fuenlabrada, en Madrid o en cientos de lugares de España, los libros esperan nuestra visita. De nosotros depende darles la mano o darles la espalda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario